Para todos aquellos que promovemos el bienestar psicológico, el reducir el riesgo de enfermar, minimizar el impacto del estrés, aumentar el rendimiento mental y físico y mantener el optimismo en el entorno laboral, nos sentimos cada vez más acompañados.
Recientemente la OMS se ha pronunciado al respecto publicando un informe en el que insiste en la necesidad de asegurar el bienestar y la salud mental en el lugar de trabajo (Mental Health and Well-being at the Workplace).
Es fantástico que con evidencia científica se destaque la importancia de que las empresas inviertan en programas de promoción y prevención de la salud para sus empleados, especialmente en períodos de crisis (debiendo abandonar la austeridad de inversión para estos fines) y así se instaure la cultura del bienestar y salud en el lugar de trabajo.
Desde la AGENCIA EUROPEA ya hace tiempo que se advierte del riesgo de no invertir en salud mental de los trabajadores: desde su informe (European Safety and Health at Work) alerta de los riesgos que supone la sobrecarga, el estrés, las jornadas de larga duración, etc…Promueve campañas de concienciación y estudios a gran escala para promocionar espacios de trabajo más saludables. Se sugieren diferentes niveles de intervención, sea a nivel individual como organizacional.
Será un reto extraordinario fomentar el “empleado saludable”. Para ello es crucial eliminar el impacto nocivo del estrés, promover en la rutina laboral la nutrición vigorizante y tonificante sin riesgos para la salud y el peso, intercalar en las densas jornadas períodos de descanso y recuperación sin ser mal vistos, que el movimiento sea práctica habitual y respetada, que se fomente la actitud mental positiva y que se permita conciliar con la vida personal.
Un gran año tenemos por delante!!
Fuente: Infocop-online. Revista de Psicología