Sobrepeso, Obesidad y sus Mitos

Mientras releía hace unos días un antiguo tratado sobre la modificación de conducta para el tratamiento del sobrepeso y obesidad, pensaba en tanta oferta que nos llega para combatir los kilitos de más tras las vacaciones, y qué pocas propuestas ofrecen realmente tratar la raíz del problema: el cómo pensamos acerca de la comida, que es lo que nos impide comportarnos adecuadamente (claro que esto, es lo más difícil…).

La base de lo que uno piensa está en sus ideas, y en el tratamiento de la obesidad se hace ver al paciente todas aquellas que son equivocadas, entre otros objetivos, y que dificultan su reducción de peso.

Casi siempre se empieza por compartir aquellas ideas erróneas que tienen para justificar su obesidad. En Psicología las consideramos mitos, son creencias populares, muchas son falsas o no del todo ciertas, y es muy importante aclararlas para facilitar una mayor efectividad en el tratamiento.

Me ha parecido interesante compartirlas, pues nunca está de más revisar nuestro esquema de creencias, y asegurarnos de si estamos o en lo cierto, y de paso, sentir mayor bienestar:

  1. La mayoría de los problemas de peso son heredados.
  2. La persona cuyos padres fuero obesos, o que lo ha sido desde la niñez, es probablemente “gruesa o rellenita” por naturaleza.
  3. Los problemas hormonales, sobre todo las deficiencias en tiroides, son responsables de muchos casos de obesidad.
  4. Es normal aumentar de peso a medida que se avanza en edad.
  5. La obesidad es un síntoma de profundos problemas de personalidad, y su tratamiento requiere para tener éxito, de una psicoterapia prolongada, que descubra la verdadera causa.
  6. El modo más rápido para perder peso consiste en eliminar de la dieta todas las grasas y todos los carbohidratos.
  7. Es posible reducir peso consumiendo alimentos naturistas.
  8. Las drogas (anorexígenas, extractos de tiroides, diuréticos, laxantes, anfetaminas) son a menudo útiles para reducir peso.
  9. El ejercicio no es muy útil para reducir peso…no quema muchas calorías, y simplemente aumenta el apetito.
  10. Pesarse a diario aumenta la motivación para reducir peso.
  11. La persona que fracasa en su intento para bajar de peso a menudo carece de fuerza de voluntad.

El esquema de mitos se publicó en el año 1976 (Mahoney y Mahoney). Más de 30 años después, parece que muchos siguen vigentes…Tantos adelantos dietéticos actuales, tecnológicos, etc, pero el sistema de creencias no parece que haya cambiado demasiado. Espero que os sirva para revisar una pequeña parte del vuestro, y desarrollar el  hábito de modificar.